McCarthy reconocida como Breakthrough Agency of the Year en Bolivia según TopFICE

McCarthy reconocida como Breakthrough Agency of the Year en Bolivia según TopFICE

Henry Medina, Creative Chairman & Founder

Mariana Arce, Copywriter & Art Director

 ¿Qué significa para ustedes recibir el reconocimiento como Breakthrough Agency of the Year entregado por TopFICE?

HM: Fue una tremenda noticia ya que tenemos solo 5 meses como agencia independiente. Esto demuestra que la excelencia creativa que veníamos consolidando hace años como agencia de red -ya que manejamos DDB y Ogilvy antes de ser independientes- se mantiene inquebrantable.

MA: Para mí, este reconocimiento es una confirmación muy bonita de algo que ya sentíamos internamente: que en McCarthy estamos empujando fuerte, creciendo rápido y haciendo un trabajo que realmente está moviendo la aguja. Y eso, para un equipo que trabaja con tanto corazón, vale muchísimo.

¿Cuál es esa receta de éxito de McCarthy para sus ejecuciones creativas? 

HM: La necesidad del double, triple, quadruple, etc check. Porque al no tener muchos recursos en general, nos vemos obligados a sacar productos de alta calidad constantemente. Es por esta forma de trabajar que llegamos a colocar a Bolivia en el puesto 4 del ranking de Eficiencia en Inscripciones de Cannes Lions 2022. 

MA: Creo que nuestra “receta” no es un secreto: es la mezcla entre estrategia muy bien pensada y creatividad sin miedo. Trabajamos mucho para encontrar insights reales, humanos, culturales… y cuando los encontramos, no los maquillamos; los potenciamos. También hay algo clave en la forma en que trabajamos; no nos enamoramos del ego, nos enamoramos de la idea. Eso hace que podamos iterar, destruir, reconstruir y volver a enamorarnos del resultado final.

 ¿Qué consejo le darían a otras agencias que quieren ganar en festivales internacionales?

HM: Revisar los festivales, ver qué piezas ganan, quiénes son los jurados, quiénes compiten, etc. Esto te dará el benchmark para establecer una vara y a partir de ahí, crear para arriba.

MA: Que no le tengan miedo a decirlo en voz alta: sí, queremos ganar premios.

Los premios no deben ser el único motor, pero negar su importancia es negarle visibilidad al país y a toda la industria creativa local. Competir afuera nos obliga a evolucionar, a pensar más profundamente y a aprender a contar historias que conecten en cualquier cultura. Las grandes ideas requieren obsesión, consistencia y un estándar alto. No es mágico, es trabajo.

¿Cómo ven la evolución del rol de la creatividad humana en un mundo que cada vez usa más IA?

HM:  El rol de la creatividad humana frente a la IA sigue siendo de liderazgo absoluto. Durante un tiempo entrenamos a ChatGPT con piezas ganadoras de Cannes y, aun así, la IA no logró generar ideas capaces de competir con las de un creativo humano entrenado.

Es como un practicante de creatividad, pero de ahí no pasa. Me refiero específicamente a la creatividad tradicional, creo que en la creatividad de “casos’, todavía puede tener una oportunidad de sorprender, pero contando historias, somos imbatibles.

MA: La IA es una herramienta increíble, y quien diga lo contrario está peleando con el viento. Pero lo que no puede replicar es la sensibilidad humana: nuestra nostalgia, nuestras contradicciones, nuestros miedos, nuestra forma de mirar el mundo.

Yo lo veo así: la IA amplifica, acelera y potencia… pero la intención, el criterio y la emoción siguen siendo 100% humanos. En lugar de competir, estamos aprendiendo a complementarnos. Y eso hace que la creatividad —la de verdad— sea aún más valiosa.

¿Cómo crean un ambiente que fomenta la innovación dentro de su equipo?

HM: Permitiendo a la gente equivocarse y aportando desde cualquier trinchera de la agencia, involucrando a los más jóvenes del equipo en procesos donde normalmente no estarían presentes como votación de festivales importantes. Si me invitan de jurado, por ejemplo, suelo invitar a los más jóvenes a ver la votación, a discutir, a ayudarlos a formar criterio real en espacios reales.

MA: Dándole espacio a las ideas y a las personas. Permitimos que todos propongan, que todos cuestionen y que nadie tenga miedo de equivocarse.

Algo que hacemos mucho es celebrar no solo los resultados, sino los intentos: las ideas que se cayeron, las que nos hicieron reír, las que parecían imposibles.

Cuando la gente se siente segura y escuchada, se anima a pensar y llegar más lejos.